Marca: Gual Home & Garden
Referencia: 44387
El avellano es un fruto que es mejor que no se humedezca mucho, ya que tiene muy poca agua.
Nombre científico: Corylus avellana.
Nombres populares: Avellano.
Variedad: Negreta Tarragona.
Familia: Betulácea.
Generalidades: El avellano es un árbol de pequeño tamaño, normalmente hace de 2 a 5 metros de altura, y tiene la copa irregular y extendida. Surgen de él, ramificaciones de varas que cuando el avellano es joven, son erectas; pero si está en la vejez, estan torcidas, como quebrantadas.
Características de la variedad: Esta variedad de avellano es de hoja caduca y se suele destinar a desgranar con tal de obtener los mejores rendimientos del grano. Además, se usa en la industria del chocolate.
Floración: Su floración se da durante el invierno.
Frutos: La avellana es un fruto esférico, que tiene una cáscara externa que protege la semilla. Contiene alto contenido en proteínas y minerales.
Multiplicación: Por estaquilla.
Flores: Las hojas crecen aleatoriamente, con formas ovaladas y redondeadas. Su textura es rugosa, de un color verde-amarillento. Hay dos tipos de flores; las masculinas y las femeninas.
Suelo: El suelo debe ser fértil y estar drenado para asegurar un buen desarrollo del árbol. Para ello es recomendable utilizar abono orgánico y minerales.
Abonado: Si se cultiva en maceta es adecuado abonar con un abono universal líquido cada mes, teniendo en cuenta que una vez al año se debe de hacer una aportación orgánica principalmente en febrero o marzo.
Si se planta en el suelo, es recomendable agregar materia orgánica durante la primavera junto con un fertilizante mineral, y una segunda aportación a finales de verano.
Riego: Durante los primeros años de un árbol frutal es importante que no le falte agua, después se puede ir reduciendo, aunque siempre será necesario regar con regularidad y con más abundancia durante los periodos más cálidos y menos durante los fríos.
El sistema de riego por goteo le asegurará un riego adecuado de los frutales. No obstante, se ha de tener en cuenta que el exceso de agua reduce el azúcar del fruto.
Podas: Es recomendable podar los árboles frutales cada año.
En términos generales se deben quitar las ramas improductivas y secas para garantizar una mejorar iluminación y aireado. Además, ayuda a que los frutos salgan con un mejor tamaño y calidad. Cierto es que existen diferentes tipos de podas, todas ellas relacionadas con el tipo de explotación.
Iluminación: Mediante la poda se consigue que las ramas reciban una buena iluminación y así, poder mejorar la calidad y cantidad de los frutos.
Temperatura: Los frutales necesitan horas de frío para permanecer en reposo y así producir frutos de mejor calidad.
Trasplante: Si el trasplante es enraizado a otro estadio se tiene que realizar en la parada invernal, en cambio, si es de maceta a suelo o a otro estadio se puede efectuar en cualquier época del año.
Plagas y enfermedades: Es importante hacer los tratamientos preventivos principalmente en invierno. Los tratamientos curativos se deben realizar al identificar los problemas.
Para realizar un trabajo práctico será interesante en la aplicación mezclar un fungicida, insecticida y un abono foliar o aminoácido. Así será conveniente tratar las enfermedades fúngicas como el oídio, mildiu... y las plagas como las orugas, cochinilla, pulgón…